Es el mismo lugar, pero diferente: las nuevas funciones de Un documental para la huérfana, de Lorena Mega, se realizarán en el hall del viejo club Buenos Aires, donde tiene sede Cultura, a metros del auditorio donde se desarrollaron las primeras pero en otro ambiente, más abierto. “Es hermoso poder hacerla ahí”, recalcó la directora, si bien la obra requiere de “un espacio íntimo”. En el lugar hay un piano, que Clara Tiani, una de las protagonistas, tocará.

Anunciaron una nueva función de Un documental para la huérfana, que será diferente: en el edificio de Güemes 35, igual que las anteriores, pero no en el auditorio sino en ‘la sala del piano’, es decir en el hall o salón. ¿Qué implicará, artísticamente?

-Sucede que nos habían quedado funciones para febrero, la obra es nueva y no queremos dejar este mes sin funciones, porque recién empezamos. Como el auditorio está ocupado para ensayos, vimos la sala del piano; si bien es una obra que requiere de sus recursos técnicos y fundamentalmente de un espacio íntimo, ese lugar es como un comedor de una casa, y más o menos en un comedor sucede la obra. Analizamos el nuevo lugar, y acordamos que es hermoso poder hacerla ahí. De hecho, hay una música en el elenco, capaz de tocar un piano (Clara Tiani, cantante, compositora e instrumentista).

¿Y lo va a tocar?

-Por supuesto. Los recursos de cada espacio son utilizados, esa es la propuesta y el desafío de Souvenir. Cuando no hay piano, empleamos el sonido de la caja de música.

Las nuevas funciones de Un documental para la huérfana, escrita y dirigida por Lorena Marisol Mega y protagonizada por Nadia S. Marchione C. y Clara Tiani, se realizarán el 10 y el 16 del corriente, a las 21.30, con entradas a 400 pesos.  

¿Cómo fue la experiencia de estas pocas funciones?

-Muy linda, muy enriquecedora. Hemos tenido un buen marco, creo que el auditorio es muy bonito para hacer funciones, un reducto muy aprovechable, con buena acústica. En una sala con capacidad para ciento de setenta personas, veinte son pocas, pero si en el lugar caben cuarenta, es un montón. Y acá el público está cercano, me gusta por la intimidad que ofrece el auditorio, que favorece a una obra como esta.

“Nos han dicho que rompimos con la estética” propia

¿Qué devoluciones han tenido?

-Muy lindas, muy agradables, muchos mensajes. Que hemos roto con la estética de lo que veníamos haciendo, principalmente, sorpresas por la producción de vestuario y maquillaje; nos han dicho que es una obra pensada artísticamente; bueno, las otras también lo eran.

Bueno, pero no les dijeron “esta es una obra pensada artísticamente”, como aludiendo a que las anteriores no, sino “es una obra pensada artísticamente”. Hay una diferencia.

-Claro. Igual no hubo mala leche en el cometario. Es un texto que en realidad puede ir por los dos lados, digo por el del humor o casi como un golpe bajo. Ha salido gente impactada con el monólogo final de Nadia, se ha sentido interpelada, y en verdad la obra muestra descarnadamente a los personajes.

“Me interpela más algo que me hace reír; hacer llorar me resulta más sencillo”

Que alguien se sienta interpelado es un buen signo.

-Sí… En realidad se puede quedar sacudido aún por las cosas que te hacen reír, de hecho, mi modo de contar el mundo recurre al humor, a reírnos de nosotros mismos. Pero no es necesario que siempre una obra te tenga que conmover desde el llanto, te puede sacudir también desde la risa, y sentirte interpelado. A mí me interpela más algo que me hace reír que algo que me provoca llorar, hacer llorar me resulta más sencillo. Hay muchas maneras de interpelar a una persona. Te puede conmover la belleza estética, las actuaciones, hay una gran variedad. El texto, un gesto… Hay cosas que conmueven a tal persona y vos como directora o actriz no lo pensaste así. Cada obra interpela y conmueve de manera de diferente, o por distintas cosas.

“Es maravilloso” que haya más de treinta obras anotadas para el regional

Para después, Un documental para la huérfana ya tiene un par de funciones previstas, en mayo, en Bahía Blanca. Y podría presentarse en el regional de teatro que el CPTI llevará a cabo a fines de abril en Bolívar. Souvenir inscribió tres obras, la mencionada, El Duelo y Las vecinas; como fue informado días atrás en entrevista con Duilio Lanzoni, de Artecon, hay unas treinta piezas inscriptas de toda la zona, más Saladillo, Cañuelas y algún distrito más, y un jurado de preselección deberá elegir las doce que conformarán la grilla. A fines de este mes se conocerá la nómina definitiva. “Es maravilloso que suceda eso en la región, y también es hermoso que seguramente Bolívar tendrá varias obras anotadas”, destacó Lorena, habida cuenta de que hoy conviven en la ciudad la friolera de siete grupos de teatro.

Chino Castro

“Nuestra idea es no bajar ninguna obra, que todas sigan circulando”

“En Souvenir no queremos bajar ninguna obra. Tenemos armadas tres carpetas con las tres, y vamos enviando a festivales (el grupo también pergeñó y llevó a tablas Las hormigas, otra pieza breve), concursos y salas, con video, tráiler. La que sale, sale, la que gusta, gusta”, afirmó una de las fundadoras, junto a Nadia Marchione, de Souvenir Teatro Fugaz durante su charla con este diario.